Sasasegawa Sasami y Natsume Rin

Una de mis mayores dudas de estas últimas semanas habría sido si la compra de estas joyitas de la saga Little Busters habría valido la pena. A primera vista son muy bonitas y a quién no le gusta un buen dulce. ¿Dónde estaba la pega? Su precio.. Aunque a muchos de vosotros le cueste creer tal comentario, decir que normalmente soy “super rata” y que exceptuando maravillas del tipo “Ignis White Dress de Orcheed Seed o la espectacular Exelica de Alter” no suelo adoptar nada que con palabras mayores no pueda considerarse ganga. No me han costado 100 euros pero pagar 7.450 yenes que es lo que costaba cada una, por unas colegialas de escala 1/8, sin ninguna parafernalia, no son moco de pavo.
¿Valió la pena pues su compra? La respuesta es sí.
Son las primeras figuras de Cospa que adquiero y no me han decepcionado para nada. Tanto el nivel de detalle como los acabados de son excelentes por no decir que son bastante macizas y estables.
Si tengo que poner alguna pega es que el nivel de plasticidad debería haber sido algo más similar al que frecuentan Good Smile y compañía. ¿A qué me refiero? ¿Nunca habéis estado limpiando 2 figuras y una a muerto en una caída y la otra ha sobrevivido varias veces a la curiosidad de la abuela? Pues eso. El material es bastante quebradizo. Algo similar a las de Orcheed Seed.
Bueno.. Supongo se puede tener todo en esta vida.
Por cierto. Si haceis una vital rondita diaria a todas las tiendas y páginas de interés a lo que a figuras se refiere, habréis reconocido a la primera esta figura de Natsume Rin. Pero.. ¿quien ha visto la se Sasasegawa? Yo no. Por original no será pues decir que es una pasada. He aquí otra historia (yo las llamo de terror) de comprar sin mirar el catálogo de los distribuidores.
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